#ElPerúQueQueremos

El mejor Jorge González, desde la separación de Los Prisioneros

Publicado: 2012-05-01

Para variar un poco el tema acá, en este sitio donde tratan de robar pantalla tanto mercantilista pro facho, hablaremos un poco de música, de buena música.

El sabado tocó Jorge González, ex lider de la famosa banda Los Prisioneros, en el estadio de San Marcos, no es la primera que voy a sus conciertos solistas, la diferencia era que esta vez, venía con una solida banda rockera, teniendo a Gonzalo Yañez en guitarra y Pedro Piedra en Batería, dos eximios músicos de la escena musical chilena (a pesar que Yañez es uruguayo, pero se ha hecho carrera en Santiago), las demás veces que ha venido Jorge ha sido o con experientos o con su proyecto electrónico pop rock. Fue un tremendo concierto la banda sonó perfecta potencia, rock melódico tocado en su estado perfecto, buen sonido en las guitarras y la batería con el toque de González tocando todo el tiempo su Órgano Roland, regalándonos tres canciones nuevas esa noche y tocando casi todos sus éxitos de todos sus discos TODOS! de la primera etapa de los Prisioneros, además de un par de sus temas solistas como Fé y Mi casa en el Árbol.

Dejo la crónica hecha por unplugged.pe:

Tomado de: http://unplugged.pe/conciertos/cronica-jorge-gonzalez-en-lima-2012/

Jorge Gonzales tocó sus grandes éxitos y sorprendió con un concierto superior a los anteriores.

Por Juan Diego Rodríguez

Prendieron unas fortísimas y cegadoras luces amarillas. La gente pifiaba desde hacía ya bastante rato. Parecía una eternidad en la que el frío que se sentía en el Estadio de San Marcos congelaba las narices de los asistentes. Los aplausos empezaron. Apagaron las luces y no había persona alguna en el escenario. Volvieron los silbidos. Una silueta, de pronto, caminó hacia un teclado Roland. Se sentó y saludó al público. Un grito ensordecedor de emoción pura llenó desde la cancha de fútbol hasta lo más alto de la tribuna norte. Era Jorge González.

El público empezó a saltar a los siete segundos de su entrada. Los acordes de guitarra de Sexo empezaron sonar y fue ahí cuando todo cobró sentido: González estaba decidido a hacer de esa noche una experiencia única en la vida. No importaría si volviese a tocar alguna vez más en nuestra capital –aunque es muy probable que continúe sus visitas anuales a Lima-, nadie nunca podrá negar que ¨Los Prisioneros” es él.

Días antes del concierto, Gonzalo Pajares, editor de la sección de espectáculos del diario Perú.21, lo entrevistó. Jorge vestía un pantalón marrón oscuro. Su polo, que se vende en la internet por 20 dólares, tenía escrita una frase: “Giraffes united against ceiling fans – protect thy neck  – ban the blades” (“Jirafas unidas contra los ventiladores de techo – protegiendo los cuellos – prohíban las hélices”).

Nariz prominentemente aguileña con una protuberancia en su inicio. Su pelo color ceniza convertía su rostro en una especie de rectángulo vertical cuya base triangular es su mentón. Cejas negrísimas, pobladas. Arrugas. Arrugas por doquier. Patas de gallo entre sus orejas y ojos verde plomizo. Han pasado 25 años desde su primer concierto en Lima. Han pasado tantos años y él, sentado, a ocho meses de cumplir 48 años, más sereno, más versado en sus instrumentos, en un sofá blanco dentro de un cuarto del mismo color.

—Yo no estoy de acuerdo en eso de ser fanático, la verdad —comentó González— Hay gente con la que uno llega a ser amigo. Me escriben, intercambiamos música… pero el concepto de un fanático, no me entra en la cabeza…

—Ajá… —afirmó Pajares.

—No me entra en la cabeza porque no puedo prestarme a la idea de que tengo que hacer música respondiendo a las necesidades de otra persona. Por eso no siento que tenga fanáticos… —sentenció, mientras movía la mano derecha abierta para enfatizar su idea.

Aunque se ha tomado dos fotos con él, Pedro Villar no se considera un fanático. Tal vez no lo quiere decir. Lo más probable es que lo niegue, pero es irrefutable que es él quien a veces, hace de community manager del grupo “Jorge González Perú” en Facebook. Hasta parece ser el administrador. “Qué concierto tan espectacular el que se vivió ayer con Jorge González, definitivamente dejó en claro que sigue siendo un capo de capos!!!”, escribió en su estado de la red social. A lo que agregó: “Para mí es el músico más grande que existe (…)”.Es quizás por esa admiración que Villar dedica tiempo a la página. Con él, ocho personas fueron a darle la bienvenida al músico chileno en el Aeropuerto. Llevaron una gigantografía con el flyer impreso. Se tomaron, por supuesto, fotografías que inmediatamente colocaron como fotos de perfil. Para ellos, fue un concierto distinto: “más allá del gran desenvolvimiento de Jorge en el escenario, aplaudo la actitud del público (…) que saltaba y coreaba todas las canciones, (…) actitud poco vista, ya que la mayoría suele optar por grabar con una cámara todo los conciertos.”, publicaron en la red social.

Es innegable que el concierto tuvo muchos errores. No solamente las cuatro veces que desafinó Gonzales; importó también que el guitarrista de la noche, Gonzalo Yáñez —quien participó en el último disco de Los Prisioneros, Manzana (2004), siendo además, parte del video del single del mismo nombre—, se equivocara al tocar los acordes de Sexo y Tren al Sur. Sin embargo, no faltaron los momentos cumbres. Corazones rojos fue interpretada con exquisita calidad. Redobles y pequeños arreglos de Pedropiedra, ex baterista de la banda sureña Hermanos Brothers. Mucho silencio. Sin ser minimalista. Luego, con Estrechez de corazón, el público no cabía dentro de sí: no concebía que estuviese tocando los más importantes temas de la discografía de ese entrañable trío que formó junto a Claudio Narea y Miguel Tapia.


Escrito por

soloruido

Objetivamente subjetivo.


Publicado en

soloruido

Blog sobre musica nomas y algun breve comentario de política cuando la coyuntura llama.